Los perros tienen un estómago adaptado a dilatarse para aumentar la capacidad de comida ingerida. Como muestra tenemos también a los leones, que después de una abundante comida deben dormir muchas horas para digerirlo con calma.
Los gatos, sin embargo, son más solitarios. Comparten territorio pero cazan solos. El objetivo principal de la caza de los gatos son las presas pequeñas: pájaros, ratones. Esto marca un ritmo alimentario diferente: deben comer poca cantidad y varias veces al día.
